A falta de la aprobación definitiva por el Congreso de Diputados, ya tenemos el Decreto que obliga a la prescripción médica por Principio Activo en la imprenta.
Reconozco que aún no he leído el texto completo del Decreto en cuestión y que escribo al calor (veraniego) de la noticia. Son muchas las incertidumbres que me asaltan y gran la preocupación que me genera esta medida. Soy un firme partidario de la receta por principio activo y de hecho siempre que puedo es mi modo de prescripción, pero ¿que va a pasar con los medicamentos no sustituibles?; esos cuyo rango terapéutico es muy estrecho y del que el paciente debe tomar la misma marca para evitar oscilaciones en la Biodisponibilidad del fármaco y riesgo de modificación de su efecto terapéutico.
¿Qué va a pasar con los trabajadores de la industria farmacéutica?. Comienza, estoy seguro de ello, una carrera de precios a la baja que por un lado va a volver loco al farmacéutico (obligado a dispensar el mas barato), que por meses o semanas tendrá modificación de precios; medicamentos en sus estanterías, aún no vendidos y superados ya por otros. Por otro lado el colectivo de visitadores médicos, que serán sin lugar a dudas los grandes damnificados.¿Qué sentido tendrá la visita médica?¿que productos nos van a presentar?, en lugar de calidad, eficacia, indicación del medicamento ¿nos van a hablar de precio?.Gran parte de ellos, ya esta ocurriendo, van a ser despedidos. De verdad lo siento (y mira que soy crítico con ellos).
Espero de las asociaciones profesionales: Colegios de Médicos y Sindicatos una reacción a este Decreto.
Siempre es mas fácil criticar que aportar soluciones, para que no se me acuse de ello tres propuestas para estudio:
1.- Selección de medicamentos financiables por el Sistema Nacional de Salud para todo el estado, basado en eficacia, efectos secundarios, riesgo-beneficio, precio, etc.
3.- Libertad de prescripción del médico y de compra del paciente. No olvidemos que hay pacientes que solo quieren una determinada marca y están dispuestos a pagarla.
3.- Aportación generalizada como ocurre con los asegurados de MUFACE y estudio de gratuidad a casos especiales (pero verdaderamente especiales).